Ese es el título de una investigación del Centro de Investigación, Educación y Encuentro Popular “Rebellato” (Cieenpre Juntos) ubicado en el barrio Villa Altamira, de Barros Blancos (Canelones). Fue desarrollada en 2016, por el Club de Ciencia “Construyendo ECO”, que participó de la Feria Departamental de Clubes de Ciencia. Es una de las experiencias que llegaron a Deci Agua, en respuesta a la convocatoria a organizaciones y centros educativos para difundir sus iniciativas orientadas a generar conocimientos locales sobre los recursos hídricos.

La cañada que pasa al borde de Cieenpre Juntos –que funciona en el ex obrador del Plan Juntos, de ahí su nombre-, atraviesa los asentamientos Paso Escobar, Bella Vista y Villa Altamira, y está contaminada. Para cambiar la situación, Ana, Delfina, Sofía, Santiago, Christian, Ariel, Romina, Florencia y Kiara, con la orientación de Yamandú Rodríguez, desarrollaron este proyecto.

Resumen de la iniciativa elaborado por Yamandú Rodríguez

Si bien queremos descontaminar la cañada, es necesario resolver dos problemas, el primero es que la cañada arrastra residuos desde la naciente y por más que nuestros vecinos dejen de arrojar basura, los contaminantes seguirán llegando con la corriente; el segundo problema es que muchos de los residuos contaminantes se encuentran disueltos en el agua. Nuestro objetivo es valorar la viabilidad y fiabilidad de construir un humedal artificial en el cauce de la cañada para lograr que disminuya la presencia de contaminantes en el agua.

Para aplicar Tecnologías Apropiadas de Saneamiento -económicas y ecológicas- es necesario conocer las características de los residuos que están en la cañada; decidimos clasificarlos en orgánicos e inorgánicos, bióticos y abióticos.

Durante varias semanas hicimos observación de la cañada y reconocimiento de elementos. Tomamos muestras de agua y las observamos con microscopio óptico, comparándolas con muestra de agua de la canilla. Experimentamos la construcción de un humedal artificial a pequeña escala para evidenciar procesos de decantación, sedimentación y absorción, con agua y vegetación de la cañada.

Para responder muchas interrogantes, entrevistamos al doctor Simón Centurión, médico de familia de la policlínica comunitaria “Entre Todos” y rescatamos los siguientes resultados:

-Medir el nivel de contaminación es muy difícil en un sitio donde el agua fluye de forma permanente y, además, cuando llueve la contaminación aumenta como consecuencia del arrastre.

-Es posible observar la presencia de indicadores biológicos; algas y hongos en el agua señalan que hay coliformes.

Centurión sugirió hacer un humedal de aguas superficiales, con una reja que retenga los residuos más grandes y con plantas de gran porte con muchas raíces y gran poder de absorción; el sauce, el ceibo y otras especies autóctonas pueden ser más eficientes que las plantas de pequeño porte.

Resultados

Observación: si bien la cañada cuenta con vegetación apropiada para la absorción y depuración del agua, la cantidad de contaminantes es mayor. El agua está muy contaminada con residuos orgánicos e inorgánicos que se entierran en el lodo, dado que tiene muy poca profundidad (menos de 60 centímetros en su parte más profunda debajo del puente).

Experimentación: se comprobó que las piedras son muy útiles para favorecer la decantación y sedimentación de sustratos y la presencia de seres vivos que se encargan de comer dichos sedimentos. Se comprobó que el agua cambió su color de marrón oscuro a transparente si bien aún había partículas suspendidas.

En síntesis: se considera que la construcción de un humedal artificial como Tecnología Apropiada de Saneamiento para mitigar el efecto del volcado de residuos en la cañada es viable. A partir de los resultados obtenidos se escribió una nota al Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, obteniendo una respuesta inmediata del Director Nacional de Aguas, Daniel Greif, quien se ofreció para reunirse pronto con nosotros para resolver el problema.